La pandemia de Covid-19 ha provocado una transformación increíble y dramática a nivel internacional. Afortunadamente, el sector minorista, sin embargo, tiene una capacidad notable para adaptarse a los constantes cambios del mercado, un activo importante frente a estos trastornos.
La gran adaptación del sector minorista siempre ha sido notable durante estos tiempos, a lo largo de la historia se ha venido adaptando a cambios que han moldeado el Retail a lo que hoy en día conocemos. La pandemia no fue la excepción, si bien es cierto, muchos locales se han visto en la terrible posición de cerrar sus puertas, muchos han podido acelerar su transformación digital en una postura casi obligatoria para poder mantener sus ventas y mantener a flote el comercio del negocio.
Para hacer afrontar esta nueva realidad, los minoristas simplemente deben reorganizar su hoja de ruta para acelerar esta transformación digital y omnicanal a fin de cumplir con estos nuevos requisitos. A medida que estas tendencias se prioricen, con estas medidas implantadas los minoristas podrán atender a sus clientes de una manera más fácil, vender y procesar pedidos, tomar decisiones más rápidas, mantener seguros y contentos a los consumidores y al personal de ventas, al tiempo que proporcionan una experiencia de tienda optima.
Unos de los puntos más importantes que se han visto forzados los minoristas para mantener el flujo de comercio minorista han sido:
1. Acelerar la transformación digital y omnicanal.
El interés por la omnicanalidad debería acrecentarse en los minoristas. Según los analistas, “el interés en estos servicios debería acelerarse, a pesar de la reapertura de un número creciente de tiendas. De hecho, la desconfianza de ciertos consumidores con respecto a las tiendas físicas debería persistir hasta que haya una vacuna disponible, mientras que otros consumidores han quedado definitivamente convencidos por el aspecto práctico de este proceso, que les permite recoger su pedido localmente sin tener que buscar sus artículos en la tienda.” – Cegid.
2. Optimizar la gestión de inventario.
Procesos como Click & Collect rápidamente resaltan las irregularidades en la gestión de inventario, en particular la falta de una visión única de las existencias disponibles. Por lo cual, para mejorar estas inconsistencias los minoristas deben acelerar su transformación digital y omnicanal e ir en búsqueda de un nuevo sistema que permita optimizar estos procesos con una visión de negocio unificada, ofreciéndoles una visión centralizada y en tiempo real de las existencias de todos los canales, para tomar decisiones pertinentes y óptimas.
3. Favorecer las aplicaciones SaaS.
Las tendencias sobre las aplicaciones en la nube ya eran solicitadas pero la pandemia ha dado a los minoristas más razones para migrar a la nube. Esto permite a los minoristas utilizar sus aplicaciones donde sea que se encuentren, mientras se adaptan a los cambios repentinos en el sector, como el procesamiento de transacciones de “manejo de peatones” o la generalización del teletrabajo para los trabajadores de oficina.
4. Repensar la transformación móvil y digital.
El consumo se verá acrecentado por los dispositivos móviles y digitales para llevar a cabo las compras. Cada vez más se estarán observando estos nuevos patrones de consumo, que si bien es cierto, existían, hoy en día se han visto acelerados por la gran demanda y las restricciones para salir a comprar en la tienda física.
5. Reforzar el uso de la realidad aumentada y virtual.
La realidad aumentada y virtual es otra medida que han adoptado los minoristas y una de las tendencias crecientes acentuadas por el Covid – 19. Esta tecnología crea una experiencia increíble y accesible en los móviles así como en audífonos de los consumidores, crea una experiencia inmersiva en las tiendas o en el hogar, sin ningún contacto físico con los productos. Los minoristas usan estas tecnologías para presentar sus productos, permitir accesorios virtuales, ver productos y crear centros comerciales virtuales.
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